juba13 escribió:
Pues a mi me encanta porque me entretiene, a nivel profesional no se parece en nada, salvo algunos "ejercicios de entrenamiento rutinario" que planificaba yo a la 4:00, una vez a la semana.
En la vida profesional real, gracias a dios en pocos casos, se enfoca más a comedia, como en una que yo era un pipiolo, suena el silbato que avisaba cuando tenían sujeto a un preso fugado y me tenía que cargar la puerta y entrar a cogerlo sin armas para no matarlo, le voy a dar la patada a la puerta y me empujan, me quedo con el pie pillado en mitad de la puerta, a los diez segundos atravieso la puerta entera y me encuentro una stein apuntándome y fallando cuando apretaba el chorizo el gatillo. Al ir sin armas salto otra vez fuera para evitar que me disparara y se me tira encima el capitán apunto de jubilarse y empieza a darme ostias, no llevaba las gafas y creía que yo era el chorizo, a todo esto el chorizo arregla la interupción y empieza a pegar tiros. Rapidamente dan la orden de tirar lacrimógenos y cuando se empieza a llenar todo de humo, la gente pregunta ¿y las máscaras antigas?, corre al coche a cogerlas....total todos fuera llorando con los lacrimógenos, el chorizo también pero el se precipitó por un barracanco.
El parte de como se desarrolló el asunto totalmente ficticio porque era de vergüenza y dieron una medalla a uno, que casulmente era hijo de un capitán y bajó al pueblo a por bocadillos mientras la movida.
Esta historia es para una película de coña, pasó de verdad, pero como hace unos 30 años la desclasifico y la cuento.
Me recuerda a las películas de Ozores
