Frases célebres de niños 2
Hay algunas muy buenas

Mi idolo, Javier de 3 años
Almudena, 4 años
Estaba Almudena jugando y su madre estaba tumbada en el
sofá viendo la tele cuando llamaron a la puerta. Su madre
le dijo: «Almu, abre, que es tu padre». Y Almudena le contestó:
«Abre tú, que es tu marido».
Luca, 3 años
Un día la madre de Luca lo vio que estaba tocándose la
«colita» con mucho afán y le preguntó: «Luca, ¿qué haces?».
Y Luca le dijo: «Estoy buscándome el hueso». «Pero, hijo, si
en la colita no hay hueso», le dijo su madre. Y Luca contestó:
«¡Que sí, mamá! ¡A veces sí!».
David, 4 años
Mirando el Guernica de Picasso, dijo: «Pero ¿qué desorden
es éste?».
Denís, 3 años
Denís tiene un amigo imaginario que se llama Pablo López.
Una noche que no quería ir a la cama su madre le dijo: «Mira,
Pablo López ya está en la cama». Y entonces Denís le
respondió: «¿Sabes, mamá...? Pablo López es un poco imaginario
».
Patricia, 4 años
Patricia se perdió un día en un centro comercial, se acercó
a un guardia de seguridad y le dijo: «Perdone, se han perdido
mis papás». Y él le preguntó: «¿No te habrás perdido tú?».
Y Patricia contestó:«No,no, yo estaba viendo los juguetes».
Marcos, 3 años
Hace poco su padre se compró un coche nuevo y el día
que lo estrenaron, Marcos, desde el asiento de atrás, le dijo:
«Oye, papá, ¿el coche nuevo se puede ensuciar?». «No,
no se puede», le respondió su padre. Y Marcos dijo: «Entonces,
¿qué hago con este moco?».
Cristina, 7 años
Ésta es una nota que Cristina les dejó a sus padres un día
que la castigaron:
«Queridos padres:
Me voy de casa porque no me merezco vivir aquí. Un beso,
Cristina.
Estoy en el garaje, adiós».
Uriel, 3 años
Un día Uriel estaba con sus padres en la terraza del bar que
ellos tienen y, sin venir a cuento, Uriel le dijo a su padre:
«Papá, hay que comprarte unos $%&/, que mamá dice que
no tienes».
Pablo, 5 años
Un día le dijo a su madre: «Mamá, ¿sabes cuál es mi mayor
tercer deseo? ¡Comerme un melón entero!». «¿Y el primero
y el segundo?», le preguntó su madre. Y Pablo dijo: «¡Todavía
no lo he pensado!».
Inés, 4 años
Inés está aprendiendo a nadar y cuando le quitan los corchos
y se tira desde el borde de la piscina, siempre vuelve
a la escalera buceando. El otro día su madre le preguntó:
«¿Por qué vas por debajo del agua en lugar de nadar por
arriba?». Ella contestó: «Es que por abajo no me hundo».
María, 5 años
Un día le dijo María a su madre: «Mamá, ¿sabes qué es un
hongosexual?». «No, mi vida, ¿qué es?», le preguntó su madre.
María contestó: «Pues es como un guay, pero que le
gustan los chicos».
Lorea, 3 años
Estaba Lorea en casa con su primo Iván cuando su madre
le dio para merendar un kiwi y su primo le preguntó: «Lorea,
¿te gustan los kiwis?». Y Lorea respondió: «Sí, y además
me hacen efecto...».
Rodrigo, 7 años
Sus padres están separados y, cuando algún hombre le habla
a su madre, él aparece y dice, señalando a su madre:
«¿¡¡¡Tú sabías que ésta tiene 36 años!!!?».
Irene, 9 años
Una noche estaba durmiendo con su madre y le dijo la niña
muy seria: «Mamá, eres como una rosa». Y su madre, emocionada,
preguntó «¿Por qué, cariño?». Y ella respondió:
«Porque te pinchan las piernas como si tuvieras espinas».
Sara, 5 años
Un día estaba Sara con sus padres y sus padrinos, y los
padrinos le preguntaron: «Sara, ¿a quién quieres más: a mamá,
a papá o a tu hermana Noe?». Y Sara dijo: «A Noe».
«Bueno, Sara, es que son cariños distintos», dijeron sus padres
un poco mosqueados. Y Sara contestó: «Ya sé que son
distintos. A Noe la quiero más y a vosotros menos».
Ruslán, 6 años
Ruslán fue al baño a lavarse las manos y se encontró el tampón
de su madre olvidado encima del lavabo. El niño salió
enfadado del baño diciendo: «¡Mamáaa, otra vez te has vuelto
a dejar el hueso de la vagina en el baño!».
Marc, 3 años
Estaba Marc en la cama con su madre y le dijo: «Yo soy Superman...
papá es Superman... y... y... ¡tú eres Superman con
tetas!».
Alejandro, 5 años
Alejandro estaba en la piscina con su padre tomando el sol
y le preguntó de repente: «Papá, si yo me pongo muy moreno,
¿seguiré hablando español?».
Blanca, 3 años
Su madre le dijo un día: «Blanca, ¿tú sabes que cuando eras
muy pequeñita estabas en la tripita de mamá?». «Sí», respondió
Blanca. Su madre siguió contándole más cosas:
«Y cuando estabas allí, oías lo que yo oía, comías lo que yo
comía... y cuando ya te hiciste más grande y no cabías en la
tripita, pues saliste por un agujerito». Entonces Blanca se
quedó un momento pensando y dijo: «Entonces ¿yo qué
soy? ¿Caca?».
Javier, 3 años
Un día en una tienda una señora le dijo: «Qué niña más guapa
». Javier, un poco enfadado, le respondió: «No soy una
niña, soy un niño». «Perdona, es que como tienes el pelo rizado
no he visto si tenías pendientes», se disculpó la mujer.
Y Javi le dijo, señalándose sus partes: «Los tengo aquí».
Paco, 8 años
Un día que estaba lloviendo muchísimo, la hermana de
Paco comentó: «Esto parece el Diluvio Universal». Y entonces
dijo Paco: «El Diluvio Universal, y yo sin conocer
el amor».
Iván, 6 años
«Los mayores son fuertes y no lloran de dolor... Lloran
de tristeza, de amor, de cebolla...».
Pilar, 5 años
El día que cumplía 5 años, cuando se despertó por la mañana,
le dijo a su padre: «Papá, yo no me noto nada, pero
¿ya sabré leer?».
Lucía, 3 años
Estaba en el sofá viendo la tele y se le cayó la Coca-Cola
que se estaba tomando y le dijo a su madre: «Mamá, se me
ha caído la Coca-Cola en el sofá, pero no pasa nada, la he
tapado con el cojín».
Guillermo, 9 años
Cuando a Guillermo le dijeron que le tenían que operar,
él se quedó muy preocupado, aunque no era nada grave,
y su madre intentó consolarlo diciéndole: «¡No llores,
tonto! ¿No ves que como vas a estar dormido no te vas
a enterar de nada?». Entonces Guillermo dijo, más tranquilo:
«Ah, pero... ¿es que me van a operar por la noche?».
Nacho, 4 años
Estaba haciendo caca y cuando acabó llamó a su tía para
que lo limpiara. La tía fue al baño y, como estaba fumando,
le dijo a Nacho: «Nacho, levántate y así tiro el cigarro».
Y él la miró enfadado y le dijo: «¿Te gustaría que yo fuera
y te hiciera caca en el cenicero?».
Adriana, 5 años
Un día le preguntó a su madre: «Mamá, Spiderman no existe,
¿a que no?» «No, claro, hija, son dibujos», le explicó su
madre. Y dijo Adriana muy convencida: «Si ya se lo he dicho
yo a los niños, que no se enteran de que es de mentira.
No como las princesas, que son de verdad y viven todas
en Disney».
Nuria, 7 años
Una tarde iba con su madre por la calle y vio a unas chicas
muy guapas y muy bien vestidas, con unas bolsas con
bebidas, y preguntó: «¿Adónde van con esas bolsas?». «Van
a hacer botellón», le respondió su madre. Y entonces Nuria
preguntó extrañada: «¿Y por qué se arreglan tanto si se
van a poner borrachas?».
Nagore, 4 años
Nagore va a clases de natación y cuando acaba se ducha
y se cambia en el vestuario de señoras. Un día coincidió
con una chica que iba en tanga, y Nagore, como nunca había
visto esa prenda, le dijo a su madre: «Ama, mira, ese culo
se come las bragas».
Eva, 6 años
A Eva no le gustan mucho ni las princesas ni las cosas de
niñas, y menos el color rosa. Su madre un día le dio una camiseta
rosa para que se la pusiera y ella no quiso, y su madre
le dijo: «Pero ¿por qué no quieres nunca el rosa?».
Y Eva contestó: «Porque es el color de las Barbies y de
las multas».
Pau, 9 años
Un día, viendo El padrino con sus hermanas mayores, les
preguntó: «¿Qué es la Mafia?». Y sus hermanas le contestaron:
«Pues son unos señores que, a cambio de dinero,
te protegen y, si dejas de pagar, tururú que te vi». Y Pau dijo:
«Ah, como la hipoteca».
Paula, 7 años
Paula siempre ve a su madre cuando se está vistiendo, y un
día, al verla con un tampón puesto, le dijo: «Mamá..., ¿la
regla viene sola o viene ya con el hilo?».
Jordi, 6 años
Ésta es la nota que le dejó Jordi al Ratoncito Pérez:
«Hola, Ratoncito Pérez, ce me ha caído el diente. Perdona,
mala noticia, me lo he tragado y no puedo darte el diente.
Pero te haré un dibujo».
Rodrigo, 5 años
En una comida vio que su madre estaba tomando vino y le
dijo: «Mami, estás tomando vino... Tú verás... no podemos
conducir por ti».
Yeray, 5 años
Yeray un día dijo que le dolía la tripa y que quería ir al baño.
Cuando volvió del baño, preguntó su padre: «¿Has hecho
la caca dura o blanda?». Yeray se le quedó mirando sorprendido
y le contestó: «No lo sé, papá, no la he tocado».
María, 6 años
En una tertulia después de una comida de cumpleaños María
empezó a suspirar y le preguntaron sus padres: «¿Qué
te pasa, María?». Y ella contestó con cara de resignación:
«Que estoy deseando jubilarme para no tener que ir más
al cole».
Manuel, 5 años
Iba en el coche con sus padres y pasó un coche fúnebre
lleno de flores, y dijo: «Mira, mamá, un coche lleno de flores,
seguro que dentro va la novia».
Óscar, 6 años
Su madre le dijo un día: «Si tu padre y yo nos separásemos...
¿tú con quién te irías?». Y Óscar se quedó pensando un momento
y respondió: «Con quien tenga Canal Plus».
Gonzalo, 5 años
Un día sus padres le preguntaron qué quería ser de mayor
y Gonzalo contestó: «Pues cuando yo sea mayor, voy
a ser trastero, para poder llevar los trastores».
Javi, 5 años
La madre de Javi le dice muchas veces eso de «Javi, estate
quieto ya, que me pones nerviosa». En una ocasión, Javi estaba
llamando a su madre y, como ella no le hacía caso, le
dijo: «Mamá, o vienes ya o te pongo nerviosa».
Sergio, 7 años
Un día Sergio preguntó a sus padres: «Mamá, ¿tú qué quieres
que sea de mayor?». «Pues me gustaría que fueras cirujano
para poder curar a todos los niños que estén enfermos
», le respondió ella. Y Sergio entonces se dirigió a su
padre: «¿Y tú, papá?». «Pues a mí me gustaría que fueras topógrafo.
Pero lo importante es lo que quieras ser tú», le
contestó él. Y entonces Sergio dijo: «Pues a mí me gustaría
ser recogepelotas».
José, 6 años
Una mañana José tenía gases y se fue al váter. Cuando salió,
su padre le dijo: «¡Hijo, menudo ruido!». Y José contestó:
«¡Es que menuda fiesta tenían las cacas en mi culo! ¡Fuegos
artificiales!».
Natalia, 6 años
En el bautizo de su hermana le dijo el cura: «Natalia, ¿con
qué líquido, que es símbolo de pureza, vamos a bendecir
a tu hermana?». Como Natalia no contestaba, el cura insistió:
«A ver, Natalia, lo tomas cada día con la comida». Y Natalia
dijo: «¡Ah, con Fanta de naranja!».
Josu, 4 años
Cuando nació su hermano pequeño Mikel, su padre lo llamó
por teléfono desde el hospital y le dijo: «Josu, tu hermano
Mikel ya ha nacido». Y Josu le contestó: «Pues que se
ponga».
Salva, 4 años
Como todas las noches, su padre fue a contarle un cuento
a la cama y le dijo: «¿Sabes qué cuento te voy a contar
hoy? El de Alí Babá y los cuarenta...». Y Salva contestó: «¡Principales!
».
Pau, 5 años
Los papás de Pau están separados. Un día estaba Pau viendo
en la tele una peli donde un cura estaba casando a una
pareja y decía la frase: «Hasta que la muerte os separe»,
y acto seguido Pau le dijo a su madre: «Mamá, ¡papá y tú estáis
muertos!».
Henar, 5 años
Un día su padre llegó de trabajar y le dio un beso y, cuando
el padre se estaba alejando, Henar se limpió disimuladamente
la mejilla. Su padre, un poco enfadado, le dijo:«Oye, no te
limpies mi beso». Y Henar respondió: «No me lo estoy limpiando,
me lo estoy extendiendo».
Ángela, 3 años
Este año ha empezado el cole y a las dos semanas de empezar,
su tío le preguntó qué tal le iba y ella le dijo: «Pues
ya me han castigado sin recreo por pelearme con una niña.
Si la vida sigue así, a mí me agobia».
Carlos, 4 años
Un día le dijo a su padre: «Papá, de mayor me gustaría ser
como tú, pero con pelo».
Paula, 5 años
Paula iba en el coche haciendo unos ejercicios que le habían
puesto en el cole. Tenía que escribir palabras que empezaran
por «ma», y empezó: «Maleta, mariposa...». De
repente preguntó: «Mamá, ¿maldito es una palabrota?». «No,
cariño», le contestó su madre. Y entonces dijo Paula: «Pues
entonces, maldito cabrón».
Vera, 2 años
Una tarde, después de estar varias horas dando vueltas por
ahí, antes de subirla al coche para volver a casa, sus padres
le preguntaron: «Vera, ¿quieres ir en el coche?». «No», respondió
Vera. «Vera, ¿quieres ir a casa de la yaya?», siguieron
preguntando. «No», seguía respondiendo Vera. «Vera, ¿quieres
ir al parque?», insistían sus padres. «No», contestó Vera
por tercera vez. Y al final su madre le dijo: «Jo,Vera, no
quieres ir a ningún sitio...». Y ella respondió toda seria: «Sí,
a la luna».
Guillermo, 6 años
Ésta es la nota que Guillermo le escribió a su padre un
día que se enfadaron:
«Papá, sé que me he portado mal contigo, por eso quiero
que me perdones, pero ahora no podrá ser porque tengo
que hacer la siesta».